lunes, 11 de mayo de 2009

El día de la masacre: Veteranos Bajo Aragón 43 - Defensores 12 (Sí, sí, doce)

Cualquiera diría que poco más hay que decir sobre este partido al ver el marcador final, afortunadamente los Defensores no son cualquiera y afortunadamente tienen mucho que decir.
Nadie entre nosotros ni entre nuestra nutrida y siempre fiel afición tendría deseos de formularse la siguiente pregunta que tal vez sí saldría de boca de nuestros rivales ¿qué hay de positivo en este partido? la respuesta sin embargo es obvia: así como los chalados solo pueden hallar la cordura o los penitentes la redención, así nosotros sólo podemos mejorar, ir hacia arriba, salir del pozo una vez nos hemos empeñado en explorar nuestros límites. No os ocultaré que un ligero sentimiento de quemazón, nunca de abatimiento, se cernió sobre mí después del partido y que también invadió a la capitana consorte y a buen seguro a más de uno entre nosotros. Pero ha bastado un paseo por el blog para recordarme porqué este equipo es especial, porqué somos los mejores aunque no seamos los primeros. Gracias muchachos por retroalimentar un sistema que da signos de una fortaleza inusitada aún en los peores momentos, que no muestra fisuras a pesar de la presión a la que lo sometemos, que se muestra claro a pesar de los borrones. Y es que al fin y al cabo somos los Defensores y eso en sí mismo es lo que nos da la supremacía.
Entrando en lo que fue el partido podríamos decir que se acabó en el primer cuarto, en el que metimos diez de los doce puntos y que acabó con un decente trece a diez en contra. A partir de ahí todo se acabó. Tal vez la presión de ser los únicos representantes del baloncesto zaragozano una vez consumado el descenso del CAI nos sobrepasó pero desde mi punto de vista lo peor que ocurrió fue no contar con un base en la pista, hemos demostrado que podemos jugar sin pivots y arreglárnoslas pero jugar sin base nos afecta fatalmente y es que perdemos la referencia de quién debe subirla o manejarla arriba y nos desordenamos no sabiendo qué puesto ocupar cada uno. También se notó el mes escaso que llevamos sin jugar lo que se agravó teniendo en cuenta que en el momento en el que más defensores hay en nómina (somos once) volvimos a presentarnos siete a jugar. Otro asunto que no por ser definitivo también ayudó a la debacle fue el árbitro que me pareció no malo sino un pelín parcial sobretodo a la hora de señalar faltas en la zona y finalmente y por ser puntillosos, el campo con unas canastas algo peculiares a las que costaba acostumbrarse y una hora intempestiva. Todo esto añadido a que el rival era claramente mejor (todavía no eran lo suficientemente veteranos como enfrentarse a nosotros en igualdad de condiciones) y con mejor forma física ayudo a que no ganáramos el primer partido copero. Lo mejor sin duda la actuación de José Ignacio que fue el mejor siendo el mayor anotador con cuatro puntazos del ala y que se batió bien en la zona y en los rebotes. También señalar la actuación de Miguel Angel que demostró que sus centímetros nos van a venir muy bien, también reboteó y luchó aunque, como para el equipo, ayer no era su día, de todas formas por su forma y maneras de juego me lo imaginé en algunos partidos de liga y creo sinceramente que va a tener días de gloria con los Defensores, además y viendo su entrada pasada en el blog es una alegría comprobar que se ha producido una auténtica comunión con el equipo demostrando que el espíritu defensor encuentra a sus acólitos allí donde éstos se escondan.
Y nada más defensores, incluid cuantos comentarios queráis y desahogaros de esta derrota que acaba con cuarenta y un días invictos pero que nos da la oportunidad de mejorar esta racha el próximo fin de semana. Y gracias finalmente a nuestra afición, siempre fiel a los valores defensores.
¡Ravus et flava, Defensores!

2 comentarios:

defensor13 dijo...

Nos zurraron la badana pero bien... la verdad es que suscribo lo dicho por el capitano. Básicamente no nos entraron las pelotas (en el pantalón). Yo particularmente me ví más fondón de lo habitual, que ya es.
Por otro lado las instalaciones dejaban mucho que desear... qué menos que poder ducharse como un ser humano occidental después del partido, ¿no?... ¿porqué no organizamos nuestros partidos en un parque?, total... así nos saldría gratis el campo...
En cualquier caso ponerse la grisigualda siempre significa un triunfo en sí mismo.
RAVVS ET FLAVA

Unknown dijo...

Hermanos Defensores, me entristece el no haber podido ir al partido, aun mas cuando comentais que no hubo ningun base. Espero que en los proximos partidos los devenires de la vida no se interpongan en nuestro camino.

Defensores!!!!